martes, 2 de septiembre de 2008

Vier Bäume


Otra vez la frontera danubiana y tan sólo un barco que cruza varias veces al día el cauce. Entre los camiones de mercancías, a lo lejos, el río orgulloso proclama torpe las fronteras y trocea la historia en un sinfín de piezas apenas unidas por la fina corriente que no vemos y deseamos seguir hasta el Mar Negro.

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